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Tres lecciones para la vida, desde Diseño de Encuadrado

Tres lecciones para la vida, desde Diseño de Encuadrado

Tres lecciones para la vida, desde Diseño de Encuadrado
Amaya Orueta
Diseñadora de Producto
6/10/2023
Contributors

Hace poco, Thomas, el CEO de la empresa, dijo una frase que me quedó dando vueltas en la cabeza: “Puede sonar frío, pero me estoy tratando como si fuera un producto”. Al principio me sentí desconcertada, porque siempre pongo mucho corazón en el diseño de mis productos. 

¿Cómo podría considerar que tratarse como un producto fuera algo frío? ¡Todo lo contrario! En realidad es un acto de amor propio. Esto me llevó a reflexionar sobre las lecciones de diseño que he aprendido en Encuadrado, que tienen un profundo impacto en mi vida personal. Te quiero compartir algunos principios del Diseño de Producto que, aplicados con amor, me ayudaron a vivir de manera más plena y significativa.

Los errores son oportunidades

Cuando diseñas un producto, es imposible innovar sin tomar riesgos y experimentar. No debe existir miedo de cometer errores, pero sí a tardar mucho en cometerlos. 

Cuando nos demoramos en tomar una decisión de Diseño en Encuadrado decimos: “golpe avisa”. Esto significa que preferimos cometer un error temprano en el proceso para aprender de él rápidamente en lugar de esperar y descubrirlo más tarde, cuando corregirlo es más costoso y complicado. 

Lo mismo se aplica a la vida personal: Sin error no hay aprendizaje, sin aprendizaje no hay desarrollo personal. Prefiero arrepentirme de lo que hice y no de lo que no he hecho. Prefiero equivocarme temprano y empezar a mejorar rápido.

Los roces son necesarios para tener relaciones sanas

Antes evitaba los conflictos, prefería “hacerme la tonta”. En Encuadrado, los debates y las discusiones son parte integral del proceso de mejora. Al principio me agotaba tener que explicar a cada rato mi punto de vista, pero con el tiempo cambió mi perspectiva. Todos estamos persiguiendo el mismo objetivo: hacer que Encuadrado sea la mejor herramienta posible. Entonces, si mi colega tiene otro punto de vista, es porque también quiere lo mejor para el producto. Así que, en lugar de entrar en confrontación, opté por escuchar con calma. Pero escuchar de verdad, intentando incluso encontrarle la razón. Las ideas pueden chocar, pero a menudo, estas tensiones llevan a soluciones más sólidas y creativas.

Lo mismo se aplica a nuestras relaciones personales: En lugar de temer a los conflictos, debemos verlos como oportunidades para comprender diferentes perspectivas y fortalecer nuestras relaciones. 

Una relación saludable se construye a través de la comunicación abierta y el resolver los conflictos, Los productos exitosos se logran a través del debate y la colaboración.

Ahora, en lugar de huir de los conflictos, me entusiasmo cuando hay que conversarlos. El otro día le dije a Pablo, nuestro Líder de Producto: “Tengo muchas ideas buenas para Encuadrado, así que seguro vamos a pelear”. “Feliz”, me respondió.

No obsesionarse con la perfección

La búsqueda de la perfección puede ser paralizante tanto en el diseño como en la vida cotidiana. Aceptar que la perfección es un ideal inalcanzable es liberador. La autenticidad y la aceptación de uno mismo son clave para una vida más equilibrada y menos estresante.

En el diseño, a menudo buscamos un equilibrio entre la estética y la funcionalidad, reconociendo que la perfección puede ser subjetiva y que hay muchos caminos para cumplir un mismo objetivo. De manera similar, en la vida personal, debemos encontrar un equilibrio entre nuestros objetivos y expectativas personales, aceptando que tenemos defectos y celebrando nuestras lo que hacemos bien.

El diseño de producto nos da valiosas lecciones sobre la creatividad, la resiliencia y la adaptabilidad. Al aplicar principios como no tener miedo a equivocarse, ver los conflictos como oportunidades y dejar de obsesionarse con la perfección, podemos mejorar nuestras vidas personales y encontrar un mayor sentido de satisfacción y realización en el camino.

Estos 3 aprendizajes son los que me dio Encuadrado: Abrazar errores como oportunidades de aprendizaje. Reconocer que los roces fortalecen las relaciones. Liberarse de la obsesión por la perfección. Estos son los principios que transforman no solo productos, sino también experiencias personales hacia una vida mejor.

Amaya Orueta

Diseñadora de Producto

Biografía

Nómada, otaku y memera. A veces dibujo.

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