Cuando se trabaja en una startup como Encuadrado, donde el ritmo de trabajo es tan acelerado, es muy fácil terminar abrumado, frustrado o incumpliendo tareas. La buena noticia es que no todo está perdido. Se puede aprender a administrar el tiempo de manera eficiente para maximizar nuestra productividad y no perder espacios de desconexión necesarios para mantener la salud mental.

Algunas claves para hacerlo tienen que ver con priorizar, establecer metas claras y optimizar nuestros recursos. De esta manera vamos a evitar esa sensación de estar constantemente contra el tiempo, logrando reducir el estrés que nos generaría y aumentando la sensación de control. Al cumplir con las responsabilidades propias de nuestro rol, alcanzamos una alta satisfacción y sensación de bienestar general.

¿Y cómo lo logramos?

No es necesario reinventar la rueda a la hora de buscar métodos de gestión del tiempo. Afortunadamente existen muchos recursos disponibles que puedes poner en práctica e ir probando para ver cuál te resulta mejor. Acá te dejamos un paso a paso para tener en cuenta:

1. Identifica tus metas: antes de ponerte manos a la obra, es importante que sepas en qué vas a estar trabajando. Tómate un tiempo para definir qué es lo que quieres lograr en el corto y/o mediano plazo y establece metas claras hacia las cuales estarás enfocando tus esfuerzos. Una vez las tengas, desglósalas en tareas más pequeñas que podrás ir abarcando de manera más fácil diaria o semanalmente.
2. Define prioridades: una vez tengas las metas y tareas claras, determina cuáles serán las más importantes. Considera el tiempo que te tomará realizarlas y el impacto que tendrá en tu objetivo final. Deja las más relevantes para hacer al principio, y elimina o delega las que solo te quitarán tiempo.
3. Asigna tiempos específicos: haz el ejercicio de estimar cuánto tiempo crees que te tomará completar cada actividad y programa tiempo en tu día para realizarlas. Asegúrate de ser realista y considerar imprevistos que puedan ocurrir.
4. Elimina las distracciones: el enemigo número 1 del trabajo enfocado. Pueden ser internas como preocupaciones (”tengo que ir a comprar al supermercado”) o externas como interrupciones (notificaciones del celular). Identifica los factores que a ti te distraigan más y haz lo posible por minimizarlas.

Método Pomodoro

Una estrategia efectiva para poner en práctica los consejos mencionados, es la aplicación del método Pomodoro. Este consiste en dividir tu tiempo en intervalos de trabajo concentrado de 25 minutos sin interrupciones y luego tomarte descansos cortos de 5 minutos. La recomendación es que repitas el método 4 veces de la misma forma y luego te des un descanso de 15 a 30min. De esta manera evitas la procrastinación, fatiga y se te hace más fácil abordar las tareas.

No hay una receta ideal para todos

No siempre será posible mantener un equilibro entre tus responsabilidades laborales y tu tiempo libre, pero la gestión eficiente del tiempo es una buena manera de comenzar. Identificar metas, establecer prioridades, asignar tiempos específicos y eliminar distracciones, ayudarán a optimizar tu productividad y aprovechar al máximo tu día.

Recuerda que no hay una receta que le funcione igual a todos y que esto es un proceso de aprendizaje continuo, que requiere adaptación y flexibilidad. Por eso mismo no olvides evaluar y ajustar tu planificación regularmente, teniendo en cuenta tu foco principal y los imprevistos que puedan ocurrir.

El tiempo es un recurso limitado muy valioso, así que depende de ti que le saques el máximo provecho y lo utilices de la mejor manera posible.

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