Termina junio, el mes de la visibilidad LGBTQ+ y hemos aprendido una enormidad por parte de nuestros usuarios sobre la relevancia de los derechos humanos de las personas LGBTQ+ en el contexto de una consulta médica o psicológica y su impacto en el día a día.

Comprendemos que, tal como lo ha sido para nosotros, es un proceso de aprendizaje y evolución constante, que terminar con hábitos que a veces no vemos como dañinos es difícil, pero que por algo se parte, y al final del día tus pacientes te lo van a agradecer.

Qué es una consulta inclusiva

Lo primero es lo básico, las bases legales que tiene cada paciente en términos de derechos humanos y diversidad sexual:

1. Derecho al reconocimiento y protección de tu identidad y expresión de género, tanto para personas transgénero como para personas intersexuales.
2. Derecho a recibir un trato digno, independientemente de su orientación sexual, identidad de género o expresión de género.
3. Derecho a recibir información suficiente, oportuna, veraz y comprensible sobre tu salud y tu sistema provisional, considerando la diversidad sexual.

Estos son los derechos mínimos que garantiza la ley, pero uno siempre puede ir más allá, todo en pos de crear una sociedad más inclusiva.

Por qué es importante tener una consulta inclusiva

Trabajar con perspectiva de género y diversidad no te hace menos profesional, al contrario, moderniza tu trabajo. En la actualidad, la cancha está ladeada hacia un enfoque más tradicional, y dar igualdad de oportunidades a las personas LGBTQ+ es una forma de contribuir al desarrollo social y humano, así como a la promoción de los derechos de las personas.

Entendemos que es un proceso educativo, pero es en pos de mejorar la calidad de vida de tus pacientes. Fíjate en estos beneficios de tener una consulta inclusiva:

• Ofreces un espacio seguro, no hegemónico y más humano. Esto es clave para que tus pacientes bisexuales, transgénero, intersexuales, transexuales, travestis y de otras identidades puedan expresar sin miedo su identidad y que el proceso terapéutico sea un éxito.
• Ayudas a prevenir y reducir la homofobia, la transfobia y la discriminación que sufren las personas LGBTQ+ en el ámbito sanitario y social. Según informes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas LGBTQ+ enfrentan barreras en el acceso a la atención médica debido a la discriminación y los estigmas asociados.
• Contribuyes al desarrollo de políticas públicas inclusivas. Promover una consulta inclusiva es un paso hacia la construcción de políticas y normativas que garanticen los derechos de las personas LGBTQ+ a nivel nacional e internacional.
• Amplías tu mercado y fidelizas a tus clientes. Las personas LGBTQ+ valoran mucho el trato respetuoso e inclusivo, y lo recomiendan a través de redes sociales y en sus comunidades.

Cómo tener una consulta inclusiva

Ahora que ya sabes qué es y por qué es importante tener una consulta inclusiva, te damos algunos consejos prácticos para lograrlo:

• Usa un lenguaje inclusivo y respetuoso. Evita los términos peyorativos o estigmatizantes, y respeta el nombre, el pronombre y la expresión de género de cada persona. Si no sabes cómo referirte a alguien, pregunta con educación y sin invadir su intimidad.
• Capacítate e infórmate sobre las realidades y necesidades específicas de las personas LGBTQ+. Existen recursos educativos y formativos sobre educación sexual y diversidad de género que te pueden ayudar a entender mejor los conceptos básicos y las buenas prácticas para atender a este colectivo.
• Crea un ambiente acogedor y diverso. Puedes usar símbolos visibles de apoyo e inclusión, como carteles, banderas o insignias. También puedes incorporar material informativo o educativo sobre temas LGBTQ+ en tu sala de espera o en tu página web.
• Sé empático y escucha activamente. No asumas nada sobre la orientación sexual o la identidad de género de tus pacientes, ni sobre sus experiencias o expectativas. Déjales expresarse libremente y muestra interés y comprensión por lo que te cuentan.
• Sé profesional y ético. No juzgues ni cuestiones la identidad o la expresión de género de tus pacientes, ni les ofrezcas tratamientos o terapias para cambiarlas. Respeta su autonomía y su derecho a decidir sobre su salud y su cuerpo.

Esto es lo que hemos aprendido

Tener una consulta inclusiva con la comunidad LGBTQ+ es una forma de mejorar tu trabajo y de contribuir a una sociedad más justa y diversa. En países como Chile y México, así como en toda América Latina, es fundamental promover la igualdad de derechos y luchar contra la homofobia, la transfobia y la heteronorma.

Esperamos que estos consejos te hayan sido útiles y que te animes a ponerlos en práctica. Recuerda que siempre puedes contar con nosotros para apoyarte en este proceso y para promover la salud mental y el bienestar de todas las personas, sin importar su orientación sexual o identidad de género.

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